Los trabajos verticales en Cantabria son muy útiles para llegar a zonas de difícil acceso, principalmente en altura, donde es necesario realizar algún tipo de trabajo. Tendemos a pensar que este tipo de tareas suponen un riesgo para los operarios, pero lo cierto es que son muy seguras. Existe una serie de elementos que se encargan de mejorar el nivel de seguridad de este tipo de trabajos, es el caso de las líneas de vida o del arnés anticaída. La importancia de estas herramientas resulta fundamental para garantizar las condiciones mínimas de seguridad, por este motivo es importante conocer su tipología y funcionamiento.
El uso de las líneas de vida se ha extendido, notablemente, en los últimos años. No es de extrañar, las técnicas de acceso mediante cuerda permite realizar los trabajos de una manera más rápida, reduciendo costes. Por ello, es habitual emplear este tipo de procedimientos en los tejados de cubiertas para naves industriales, tejados de viviendas y todo tipo de estructuras verticales.
Este procedimiento es muy adecuado para realizar trabajos de reparación, mantenimiento, limpieza, etc… en zonas de difícil acceso. En Acebo Rehabilitación somos expertos en este tipo de trabajos, por ello te podemos contar muchas cosas interesantes sobre las técnicas de acceso mediante cuerda.
En primer lugar, tenemos que entender que las líneas de vida hacen referencia a uno de los elementos que componen los sistemas de protección individual (EPI) contra el riesgo de caídas. A su vez, dichos sistemas deben de estar debidamente certificados y homologados. En cuanto a los tipos podemos clasificarlos de la siguiente manera:
- Líneas de vida verticales. Como su propio nombre indica, se emplean en paramentos verticales y consisten en la instalación de un cable o raíl que va fijado a la estructura. Además, cuentan con un elemento que se conoce como carro anticaídas, que circula libremente por el cable o raíl. Sin embargo, en caso de producirse una caída este se bloquea, manteniendo el operario en suspensión.
- Líneas de vida horizontales. Se emplean en cubiertas, tejados y otros paramentos horizontales. También se componen de un sistema de cable o raíl, pero funciona por anclajes, lo que permite una mayor libertad de movimiento. El operario permanece enganchado a la línea mediante algún elemento de amarre que no se soltará en caso de accidente o descuido.