Existen muchas razones por las que acometer trabajos de saneamiento exterior en un edificio. El paso del tiempo y la exposición a los elementos climatológicos inciden directamente en su deterioro y desgaste. En consecuencia, su mal estado puede suponer un riesgo para vecinos y peatones. A esto hay que añadir que las construcciones antiguas son muy poco eficientes, energéticamente hablando. Son propensas a sufrir filtraciones y humedades, además de estar mal aisladas y perder calor en invierno. Grupo Acebo, empresa especializada en rehabilitación de fachadas en Cantabria, analiza los problemas que presenta el inmueble para ofrecer las soluciones más eficaces. Son muchos los medios técnicos y los materiales óptimos que se han utilizado a este fin. Vamos a ver algunos de los sistemas más usados en el revestimiento de fachadas.
Métodos y materiales para revestir y rehabilitación de fachadas
Los sistemas utilizados en la construcción para mejorar el aislamiento, impermeabilizar y aumentar la eficiencia energética han ido evolucionando a medida que han ido apareciendo nuevas tecnologías. Así, tradicionalmente se aplicaban tratamientos basados en el cemento, la pintura y los enfoscados monocapa. Actualmente se han desarrollado nuevos métodos para revestir fachadas que ofrecen excelentes mejoras en cuanto a resistencia y aprovechamiento energético.
El enfoscado de mortero de cemento se caracteriza por su dureza y rigidez. Aunque inicialmente resulte más económico que otras técnicas, suele sufrir grietas, desconchones y deterioros que requieren un mantenimiento periódico. Así, a la larga el desembolso será mayor puesto que tampoco aporta aislamiento térmico.
Los enfoscados monocapa se realizan a base de morteros de cemento, aditivos, áridos, fibras y agua. Se aplican en una capa de 15 mm de espesor. Tiene propiedades impermeables y transpirables pero no de aislamiento térmico o acústico.
El sistema SATE consiste en la colocación de planchas con gran poder aislante térmico que se fijan directamente sobre la fachada. Los materiales más usados son el poliestireno, el corcho blanco y la lana mineral que se cubren con mortero acrílico impermeable. El resultado es una alta resistencia a la humedad además de permitir la transpiración del vapor de agua y un importante ahorro energético.
Finalmente, las fachadas ventiladas consisten en una hoja interior, un aislante y una hoja exterior no estanca. Se monta sobre una estructura de aluminio o acero inoxidable dejando quedando una cámara de ventilación entre el paramento exterior del edificio. Esta opción es la que ofrece mejores resultados de ahorro, eficiencia, aislamiento y estética.
Como expertos en trabajos de rehabilitación de fachadas en Cantabria, en Grupo Acebo aportamos soluciones adaptadas a todo tipo de proyectos. Consúltanos y nos aseguraremos de dotar a tu hogar del máximo confort.